Les invito a escuchar el audiocuento: "Mi perro canelo" de Margarito Ledesma
Mi perro Canelo
Margarito Ledesma
Yo tenía un perro canelo,
un perro muy entendido;
nomás le echaba un chiflido,
y hasta botaba en el suelo.
Le decía “vete”, y de iba;
“quédate aquí”, y se quedaba;
“bájate de ahí”, se bajaba;
“sube”, y subía para arriba.
Le decía “dame la mano”,
luego luego me la daba;
le decía “baila”, y bailaba
como si fuera un cristiano.
Le decía “ven acá, perro”,
y luego luego venía;
solo cuando no quería,
iba a esconderse en el cerro.
Todo lo que le mandaba
con mucho gusto lo hacía,
y si nada le decía,
el tampoco no hacía nada.
Tiraba piedras al cerro
y el iba y las recogía,
y luego hasta me traía
en vez de piedra, un becerro.
Pero no vayan a creer que era un becerro grande, pues no hubiera podido con él; sino becerritos chiquitos, de esos que todavía maman, y a veces un chivito o un puerco de tamaño mediano.
Era un perro de buen paso
que siempre me obedecía;
solo cuando no quería ,
entonces no me hacia caso.
Le decía “no hables”, no hablaba;
“no comas”, y no comía;
“no tuesas”, y no tosía;
“no gruñas”, y no gruñaba.
Era un animal tan bueno
que todo, todo lo hacía.
¡Lástima que un policía
me le haya echado veneno!
Nota – Muy bien sé que no se dice “gruñaba”, sino “gruñía”; pero si le hubiera puesto así no habría resultado el verso, y entonces los que ustedes ya saben habían de decir que qué feo le andaba haciendo yo. Por eso le puse “gruñaba”.
La Época Del Cedro
ReplyDeleteAy. El polen me esta matando. No se si llamarles los cedros, los enebros, las coniferas, o las tuyas. Pero hoy, son las mías. Disculpe, tengo que estornudar.
Mi hermano me advirtió: « Si vienes a Austin, vas a sufrir ». Pues, nada el primer año. ¿Estaría exagerando? No puede hacer; él es un pedazo de pan. El segundo año, tras, el polen aterrizó cuadradamente en mi rostro. Y, cada año se pone peor.
El polvo es color canela. No hay cristiano que puede esconderse. Ni toser bota este veneno.
Lo que no entiendo es como solo aflicta a los seres humanos. Nunca he visto un chivito con un pañuelo, o un becerro con un kleenex. ¿Tú? Inteligente fue él que se fue de «vaca». Así lo voy hacer yo.
Ron,
ReplyDeleteEl polen también me está matando a mí. Siempre he tenido alergias, pero desde que vivo en Austin, las alergias se han incrementado. Es una verdadera lata a veces tener que estornudar como 7 veces seguidas y no parar hasta sonarse la nariz. En fin, creo que ese es el precio por vivir en esta bella ciudad.
Ahora releamos tu historia y luego mis comentarios:
“Ay. El polen me esta (1) matando. No se (2) si llamarles los cedros, los enebros, las coniferas (3), o las tuyas. Pero hoy, son las mías (4). Disculpe, tengo que estornudar. Mi hermano me advirtió: « Si vienes a Austin, vas a sufrir ». Pues, nada el primer año. ¿Estaría exagerando? No puede hacer (5); él es un pedazo de pan. El segundo año, tras el pollen (6), aterrizó cuadradamente en mi rostro. Y, cada año se pone peor. El polvo es color canela. No hay cristiano que puede esconderse. Ni toser bota este veneno. Lo que no entiendo es como (7) solo aflicta (8) a los seres humanos. Nunca he visto un chivito con un pañuelo, o un becerro con un kleenex. ¿Tú? Inteligente fue él que se fue de «vaca» (9). Así lo voy hacer yo.”
Mis comentarios:
(1) “esta” – Falta acento.
(2) “se” – Falta acento.
(3) “confieras” – Falta acento.
(4) “o las tuyas. Pero hoy, son las mías.” – no me quedó claro qué quisite decir en estas dos frases.
(5) “hacer” – “ser”.
(6) “tras el pollen”- no entendí por qué usaste “tras”. La palaba “pollen” tiene una “l” de más.
(7) “como”- Faltó acento.
(8) “aflicta”- “afecta”.
(9) “Inteligente fue él que se fue de «vaca»” – No me quedó clara esta frase.
¡Gracias por participar!
Había una mujer con piel canela y le encantaba bailar. Cuando bailaba, botaba en el suelo y estaba muy feliz. Sin embargo, su marido no quería que bailara porque era cristiano y creía que debiera esconderse en su habitación. Y no quería que ella escuchara a ningún tipo de música. Solo le permitió de cocinar chivito y becerro para su cena. Un día, ella decidí que ya no le obedeceria nunca mas y puse el veneno en su comida. Luego, lo enterró debajo las piedras del cerro. Nunca mas escucharía ella "ven aquí, perro" y podía bailar cuando y donde quería.
ReplyDeleteDustylee
ReplyDeleteNo cabe duda que esta es una historia que todavía puede suceder en cualquier lugar del mundo. Es una lástima que la represión a la mujer continúe dándose de muchas formas. La que tú escribes es solo una de tantas formas de represión que desafortunadamente a veces no terminan muy bien, como en tu historia. ¡Felicidades!
Ahora leamos tu historia nuevamente y luego mis comentarios:
“Había una mujer con piel canela y le encantaba bailar. Cuando bailaba, botaba en el suelo y estaba muy feliz. Sin embargo, su marido no quería que bailara porque era cristiano y creía que debiera esconderse en su habitación. Y no quería que ella escuchara a(1) ningún tipo de música. Solo le permitió de (2) cocinar chivito y becerro para su cena. Un día, ella decidí (3) que ya no le obedeceria (4) nunca mas (5) y puse (6) el veneno en su comida. Luego, lo enterró debajo (7) las piedras del cerro. Nunca mas (8) escucharía ella "ven aquí, perro" y podía bailar cuando y donde quería.”
Mis comentarios:
(1) – “a”- No necesitas poner esta preposición.
(2) “de” - No necesitas poner esta preposición.
(3) “decidí”- “decidió”
(4) “obedeceria” – Faltó acento.
(5) “mas” – Faltó acento.
(6) “puse” – “puso”.
(7) “debajo” – debajo de”.
(8) “mas” Mismo que # 5
¡Gracias por participar!